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Los implementos de protección personal (IPP), también conocidos como equipos de protección personal (EPP), son dispositivos, prendas o accesorios diseñados para proteger la salud y la seguridad de los trabajadores en diversos entornos laborales. Estos implementos están destinados a reducir el riesgo de lesiones, enfermedades u otros peligros que puedan surgir durante la ejecución de tareas específicas.

Algunos ejemplos comunes de IPP incluyen:

  1. Cascos de seguridad: Utilizados para proteger la cabeza contra impactos, objetos que caen, o golpes en entornos de construcción, industriales o de trabajo en altura.

  2. Gafas de seguridad: Diseñadas para proteger los ojos contra salpicaduras químicas, partículas voladoras, radiación ultravioleta, entre otros riesgos.

  3. Guantes de protección: Hay diferentes tipos de guantes para proteger las manos contra cortes, abrasiones, productos químicos, calor, frío, electricidad, entre otros riesgos.

  4. Calzado de seguridad: Botas o zapatos con puntera de acero o composite para proteger los pies contra aplastamientos, cortes, perforaciones, entre otros peligros.

  5. Protección respiratoria: Máscaras, respiradores o equipos de filtración de aire que protegen contra inhalación de polvo, gases, vapores, y otros contaminantes del aire.

  6. Chalecos reflectantes: Utilizados en entornos de trabajo donde se requiere visibilidad para proteger al trabajador de ser golpeado por vehículos u otros objetos debido a la falta de visibilidad.

La selección y el uso adecuado de los implementos de protección personal son fundamentales para garantizar la seguridad y la salud en el lugar de trabajo. Además, es importante proporcionar capacitación adecuada a los trabajadores sobre cómo utilizar y mantener correctamente estos equipos.